Somos especialistas en cirugía de columna vertebral en León Guanajuato y nuestros años de experiencia nos han dado el conocimiento para determinar que de acuerdo al grado de la enfermedad en la columna, se determina el tratamiento. Luego de intentar el tratamiento conservador, se intentará la cirugía de mínima invasión. Con el paso del tiempo, la columna se ha visto beneficiada por una evolución satisfactoria en cuanto a intervenciones quirúrgicas, que se ha transformado en beneficio directo para los pacientes.

Los avances de la tecnología se han visto reflejados directamente en logros extraordinarios en cuanto a la pronta recuperación y buena evolución de las patologías vertebrales. La evolución por la que ha atravesado esta cirugía en la última década, con la incorporación de nuevas tecnologías y técnicas mínimamente invasivas, han hecho que este tipo de intervenciones sean las más seguras en su área.

En la actualidad, la capacidad diagnóstica se ha desarrollado de manera impresionante, gracias a la resonancia magnética que en esta época es muy accesible, e incluso se puede realizar en máquinas abiertas, con una resolución y calidad inigualables, que permiten utilizarse en movimiento, incluso para el corazón. Además de resonancias magnéticas verticales para comprobar la influencia de la carga y el peso corporal sobre la columna. Aún a pesar de los avances médicos en torno a estas cirugías, el hecho de hablar de ellas evoca de inmediato una serie de imágenes que implican grandes incisiones que sería difícil no relacionar con una recuperación difícil y dolorosa.

Sin embargo esa fue una realidad de antaño, cuando las únicas herramientas eran las manipulaciones e inmovilizaciones con los incómodos yesos, corsés y periodos prolongados de reposo en cama. Siempre será interesante conocer el proceso y la historia por la que han atravesado los procesos médicos, cambios y evoluciones que los han llevado hasta convertirse en lo que ahora conocemos.

La evidencia más antigua de lesiones de columna, fue escrito 1700 años A.C., es copia de un manuscrito original que data de 3.000 años A.C. y nos da información de la medicina de Egipto; en él se describen seis casos de lesiones traumáticas de la columna, dos de ellas con lesión neurológica consistente en cuadriplejía  y lesión de esfínteres, haciendo diferencia entre las lesiones altas y bajas de la columna, además de recomendar cerrar la herida cuando existía. En aquel tiempo no se recomendaba hacer otro tratamiento, pues estas lesiones espinales se consideraban casos sin esperanza.

  • 430 – 380 A.C. En la época de Hipócrates Se menciona la dislocación de las vértebras y las relaciona con parálisis de los miembros, aunque no se relaciona con la medula espinal. Se teorizaba que las fracturas se podrían manipular a través del abdomen, como se podría hacer en un cadáver, además de mantener inmovilización y reposo absoluto. En aquella época quienes padecían de lesiones espinales se inmovilizaban de manera externa, y también se tenía el conocimiento de que quienes tuvieran lesiones neurológicas no tenían recuperación.
  • 335 – 280 A.C. En la época de Herófilo de Calcedonia El médico griego de la primitiva escuela de Alejandría, nacido en Calcedonia, es considerado el padre de la anatomía científica debido a que fue el primero en basar sus conclusiones en la disección del cuerpo humano. Describió los nervios que disecó hasta la medula espinal y estudió el cerebro, reconociéndolo como el centro del sistema nervioso. Diferenció los nervios motores de los sensoriales, describiendo con exactitud el ojo, el cerebro, el hígado, el páncreas, además de los órganos salivares y genitales. Conocía que las lesiones espinales eran mortales y no aconsejaba tratamiento, además fue el primero en conocer que las arterias contenían sangre y no aire.
  • Siglo XVIII De aquel momento se tienen vestigios de dos casos exitosos que le dieron gran auge a la cirugía de columna, el primero data de 1753, luego de que un soldado sufre paraplejia por una bala que le afectó la tercera vértebra lumbar. La Academia Real de Cirugía de Francia constató que el cirujano logró extraer la bala, después de cinco intentos, dando por resultado que el soldado lograra recuperar ciertos movimientos. El segundo caso data de 1762, cuando un capitán del ejército francés sufre de paraplejia a causa de uno de los ataques sufridos en batalla. Por su parte, la Academia Francesa de Cirugía, constató que luego de la operación, se logró remover con éxito un fragmento metálico y días después el capitán logró su recuperación.
  • Siglo XIX Se da el inicio de la laminectomía, que en aquella época se conocía como trefinación de la columna. Se le conoce como un tipo de cirugía en la que el médico extirpa parte del hueso vertebral (lámina), para aliviar la compresión de la médula espinal o de las raíces nerviosas que pueden estar causadas por lesiones, hernia de disco, estenosis espinal o tumores. En la actualidad se le sigue considerando una opción, solo cuando los tratamientos previos han resultado ineficaces.
  • 1977 Se introduce a nivel lumbar un método interlaminar, conocido como microdiscectomía lumbar, en el que se realizaba una resección parcial de las estructuras óseas, seguido de la extirpación de material discal. Su uso se generalizó a inicios de 1990, en aquel momento, muchos cirujanos de columna abandonaron la discectomía convencional para pasar a la práctica habitual de la microdiscectomía.

Los avances en la cirugía de columna se han venido desarrollando desde hace más de 200 años, y en la actualidad se han visto reflejados en un gran campo de acción con diversas técnicas quirúrgicas que permiten reconstruir y acelerar la recuperación de los pacientes. Gracias a los avances técnicos en mejora de los implantes y de las posibilidades de las imágenes radiológicas, se puede hacer la misma cirugía por pequeñas incisiones, aunque para los cirujanos, una cirugía mínimamente invasiva supone alargar las intervenciones y estar expuesto a mayor cantidad de radiografías, aunque no implica perder sangre. Las estancias postoperatorias son más cortas y las necesidades de analgésicos menores, debido a que las heridas tan pequeñas no producen mayores molestias y los pacientes tienen una pronta recuperación.

En la Columna Vertebral somos especialistas en cirugía de columna, incluso el término correcto es cirugía mínimamente invasiva de columna vertebral, gracias a las posibilidades que se pueden alcanzar con la intervención por pequeñas invasiones.

¿Dudas? ¡Les invitamos a contactarnos! Será un placer conocerles y mejorar su calidad de vida.

¿Necesitas atención especializada?

Agenda una visita